jueves, 15 de diciembre de 2016

Dolor anal. Hay que estudiarlo.

           
             El dolor anal es una condición que puede tener múltiples causas. Si bien es cierto que las más frecuentes son patologías benignas como las hemorroides o la fisura anal, existen otras enfermedades que cursan con dolor anal y que conviene descartar, como pueden ser: fístulas anales, abscesos, tumores, síndrome de defecación obstructiva, prolapsos...

             En el estudio del dolor anal es fundamental, como en casi todas las enfermedades, una profunda y precisa anamnesis (historia clínica). La exploración física en consulta también es clave en el proceso diagnósico, así como la anoscopia directa. En ocasiones puede ser suficiente para llegar al diagnóstico con la anamnesis, exploración y anoscopia, pero en otros casos el diagnóstico queda en una aproximación y se hace necesario hacer otras pruebas complementarias para descartar o confirmar el diagnóstico inicial.


             En mi opinión, las pruebas complementarias inicialmente necesarias para el estudio de dolor anal son la ecografía endoanal y la manometría anal, en concreto el perfil presivo esfinteriano. Estas dos pruebas son de inestimable ayuda tanto en la orientación diagnóstica, en la planificación del tratamiento a realizar, así como seguimiento para ver los resultados del tratamiento llevado a cabo.


Muchas gracias. 
             

domingo, 6 de noviembre de 2016

Ecografía o ultrasonografía anal

             Una de las pruebas diagnósticas que utilizamos los proctólogos es la ecografía anal. Es nombrada de varios modos: ecografía anal,  ecografía endoanal, ultrasonografía... se trata de una técnica que hacemos habitualmente los propios proctólogos, ya sea en consulta o en el propio quirófano. No es dolorosa, es rápida, y ofrece información clave en el estudio de algunas patologías como: dolor anal, sangrado o supuración por el ano, fístulas anales, estudio de incontinencia...

                Siempre recomiendo a los pacientes a los que hago la ecografía anal que vengan a la prueba con ropa cómoda. No es necesario acudir acompañado, ya que no se administra medicación sedante pues no es una prueba dolorosa. Por mi parte suelo utilizar un lubricante con anestésico para reducir al mínimo las poco probables molestias de la ecografía endoanal.

                Son muy pocas e infrecuentes las complicaciones de la ecografía anal o endoanal, pero sí es normal que, tras la exploración, pueda tener cierta sensibilidad en la zona o, menos frecuentemente, un poco de sangrado en los primeros días posteriores a la prueba. 


Muchas gracias.